miércoles, 19 de marzo de 2008

PAZ

Hace unos días murió el último de los combatientes franceses de la Primera Guerra Mundial, su nombre era Lazare Ponticelli y ha fallecido a los 110 años de edad.

Este señor nacido en el siglo XIX, cuando todavía Cuba era española y en Filipinas se Hablaba el español, ha vivido y sufrido el siglo XX en toda su extensión, si algo tuvo claro es que la guerra es la peor de las salidas ante un conflicto. Hoy en día es muy fácil llenarse de heroismo y patriotismo al hablar de trincheras, de ataques y contraataques, de resistencias y ofensivas pero la realidad es muy distinta, muy pocos narran como era la vida real en las trincheras, el olor de los compañeros y amigos muertos, la angustia de los familiares de los desaparecidos.

Os dejo el enlace de un vídeo del diario Le Figaro con imágenes reales de 1918, en los útimos años de la Gran Guerra, esperemos que imágenes semejantesno tengan que volver a reproducirse en nuestros telediarios.


Por último, señor Aznar: deje de beber y de lanzar odas a las guerras, si tanto le gustan debería haber comenzado haciendo la mili...

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